MAGISTRADO-PONENTE: LEVIS IGNACIO ZERPA

Exp. Nº 13130

 

El Tribunal Superior Noveno de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda, adjunto a oficio Nº 2.061 de fecha 18 de noviembre de 1996, remitió a esta Sala el expediente contentivo de la apelación interpuesta por la abogada Sebastiana Aloisio, actuando como representante de la PROCURADURÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA, contra la sentencia dictada por ese tribunal el 12 de agosto de 1996, la cual declaró “con lugar” el recurso contencioso tributario interpuesto por la contribuyente UNITED INTERNATIONAL PICTURES, S.R.L., sociedad mercantil inscrita en el Registro de Información Fiscal (RIF) con el número J00075470-5, contra la Resolución Nº HCF-SA-PEFC-195 de fecha 29 de junio de 1992 y contra las planillas de liquidación números 01-1-65-000238 y 01-1-65-000239 de fecha 19 de octubre de 1992, actos emitidos por la Dirección General Sectorial de Rentas del Ministerio de Hacienda (hoy Ministerio de Finanzas).

El 03 de diciembre de 1996 se dio cuenta en Sala y por auto de la misma fecha, se ordenó aplicar el respectivo procedimiento de segunda instancia, se designó ponente al  Magistrado Nelson Rodríguez García y se fijó el décimo (10º) día de despacho para comenzar la relación, la cual se inició el 08 de enero de 1997, cuando la representación fiscal consignó el respectivo escrito de formalización de su apelación.

En fecha 06 de febrero de 1997 se reasignó la ponencia a la Magistrada Josefina Calcaño de Temeltas.

En la audiencia del 06 de marzo de 1997, estando en la oportunidad fijada para celebrar el acto de informes, únicamente compareció la abogada representante de la Procuraduría General de la República consignando el respectivo escrito y, seguidamente, se dijo “VISTOS”.

En fechas 15 de octubre de 1998 y 14 de enero de 1999 se reconstituyó la Sala Especial Tributaria II y se reasignó la ponencia al Conjuez Humberto D´Ascoli Centeno.

Mediante auto de fecha 17 de marzo de 1999, la Sala solicitó a la Administración Tributaria, información sobre la posible existencia de algún acuerdo o convenio transaccional celebrado con la deudora tributaria.

El 20 de enero de 2000 se reasignó la ponencia al Magistrado Levis Ignacio Zerpa, quien con tal carácter suscribe el presente fallo.

En virtud de la designación de los Magistrados Hadel Mostafá Paolini y Yolanda Jaimes Guerrero, y la ratificación del Magistrado Levis Ignacio Zerpa, por la Asamblea Nacional en sesión de fecha 20 de diciembre de 2000, publicada en la Gaceta Oficial N° 37.105 del día 22 del mismo mes y año, se reconstituyó la Sala Político Administrativa el 27 de diciembre de dicho año, y se ordenó la continuación de la causa en el estado en que se encontraba.

Para decidir, la Sala observa:

De conformidad  con  lo establecido en el artículo 86 de la Ley Orgánica de la Corte Suprema de Justicia, la instancia se extingue de pleno derecho en las  causas que  hayan estado paralizadas por más de un año a partir del último  acto  de procedimiento, por lo que, en tal caso, este Supremo Tribunal sin más trámites debe declarar la perención, de oficio o a instancia de parte.

En este sentido, esta Sala en decisión de fecha 13 de febrero del presente año declaró que la perención:

“Se trata, así, del simple cumplimento de una condición objetiva, independiente por tanto de la voluntad de las partes, es decir, no atribuible a motivos que le son imputables, y consistente en el solo transcurso del tiempo de un año de inactividad para la procedencia de la perención. Ello refleja la verdadera intención del legislador ya plasmada en anterior decisión de esta Sala (Vid. caso: CEBRA, S.A. del 14 de julio de 1983), no sólo de evitar que los litigios se prolonguen indefinidamente, así como el exonerar a los Tribunales, después de un prolongado período de inactividad procesal, del deber de dictar nuevas providencias en casos presuntamente abandonados por los litigantes. Se tuvo también en cuenta la necesidad de eliminar la incertidumbre acerca de la firmeza de los actos del Poder Público, los cuales pudieren ser objeto de impugnación por inconstitucionalidad o ilegalidad ante el Supremo Tribunal o ante los demás órganos de la jurisdicción contencioso-administrativa

(...omissis...)

Así, declarada la perención en el juicio, el efecto se limita a la extinción del proceso privándose de firmeza al acto recurrido cuando se vulnere el orden público, y su control por Ley, corresponda a este Alto Tribunal; por tanto quienes tengan interés personal, legítimo y directo pueden proponer nuevamente la demanda conforme a los supuestos y mediante los mecanismos legalmente establecidos.

Por último, esta interpretación es en un todo coherente con el resto del texto de la Ley bajo examen, por cuanto no contradice el artículo 96 eiusdem que dispone:

‘Los informes constituyen la última actuación de las partes en relación con la materia litigiosa que sea objeto del juicio o de la incidencia de que se trate. Concluido el acto de informes, no se permitirá a las partes nuevos alegatos o pruebas relacionadas con dicha materia, salvo lo dispuesto en el artículo 407 del Código de Procedimiento Civil (artículo 514 del Código vigente), pero quienes hayan informado verbalmente pueden presentar conclusiones escritas dentro de los tres días siguientes.’

En efecto, cuando la norma transcrita establece que la "última actuación de las partes" en el juicio son los informes, se está refiriendo según el significado de las palabras empleadas y su conexión entre sí a que no se permite a los litigantes después de informes traer nuevos alegatos o pruebas; sin que ello implique un impedimento para seguir actuando en juicio, en la forma de impulsar el procedimiento hasta su definitiva conclusión con el fallo respectivo.

De ahí que no están las partes exceptuadas de actuación en juicio una vez consignados los informes, como pudiera derivarse de una errónea interpretación literal del texto. Por el contrario, como ha quedado puesto de manifiesto la inactividad de las partes en el juicio, aún después de la oportunidad fijada para informes y de vistos, conforme al texto normativo especial que reglamenta los procedimientos que se ventilan ante este Supremo Tribunal, evidencia un abandono del caso que no puede justificar la incertidumbre creada respecto a la firmeza de determinado acto del Poder Público.

En suma, que según los términos del artículo 86 de la Ley Orgánica de la Corte Suprema de Justicia, aplicable a los procedimientos que se ventilen ante este Tribunal Supremo de Justicia, salvo lo previsto en disposiciones especiales, basta para que opere la perención de pleno derecho, el que se haya paralizado la causa por más de un año, independientemente de que se trate de razones imputables a la parte o del estado en que la misma se encuentre. Así se declara.”

Al respecto, examinadas las actas procesales que componen el presente expediente, se constata que la causa estuvo paralizada desde el 06 de marzo de 1997, fecha en la cual se dijo “VISTOS”, hasta el 17 de marzo de 1999, cuando la Sala solicitó información sobre la posible existencia de algún acuerdo o convenio celebrado entre las partes; y desde esa fecha, hasta el presente, sin que se hubiese realizado acto alguno de procedimiento por las partes ni por este Supremo Tribunal.

Igualmente, se aprecia que en el caso de autos no se vulnera ninguna norma de orden público con la aplicación de la indicada disposición, por lo cual, habiendo transcurrido con creces el lapso previsto en la misma y siguiendo el criterio jurisprudencial arriba transcrito, se ha consumado la perención. Así se declara.

En virtud  de  lo  anterior, esta  Sala  Político-Administrativa  del  Tribunal  Supremo de Justicia, administrando  justicia en nombre de la República y por autoridad de la Ley, declara CONSUMADA LA PERENCIÓN y, en consecuencia, EXTINGUIDA LA INSTANCIA en la presente causa.

Queda así, firme la sentencia apelada.

Publíquese, regístrese y comuníquese. Devuélvase el expediente al Tribunal de origen. Cúmplase lo ordenado.

Dada, firmada y sellada, en el Salón de Despacho de la Sala Político-Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia, en Caracas, a los treinta (30) días del mes de octubre de dos mil uno. (2001). Años 191º de la Independencia y 142º de la Federación.

    El Presidente-Ponente,

 

LEVIS IGNACIO ZERPA

El Vicepresidente,

 

 

HADEL MOSTAFÁ PAOLINI

YOLANDA JAIMES GUERRERO

                  Magistrada

 

La Secretaria,

 

 

ANAÍS MEJÍA CALZADILLA

Exp. Nº  13130

LIZ/jam

En treinta y uno (31) de octubre del año dos mil uno, se publicó y registró la anterior sentencia bajo el Nº  02435.