Malavé Correa, de conformidad con lo previsto en el ordinal 2º de la Ley Orgánica Procesal del Trabajo, denunció la infracción del artículo 5°, de la misma ley, en concordancia con los artículos 60, 133 de la Ley Orgánica del Trabajo, adminiculados con las Cláusulas de la Convención Colectiva de Trabajo Nacional 2001-2003 celebrada por Cadafe y sus empresas filiales, que se mantienen vigentes en la Convención Colectiva vigente, Cláusulas 2ª y 69, por falsa aplicación y falta de aplicación. De esta manera el formalizante alegó que conforme a las de la Contratación Colectiva vigente con la empresa demandada, la asignación de viáticos, vehículo y gastos de vida, revisten naturaleza salarial, y que el compromiso adquirido por el patrono con los Directivos de Fetralec y sus sindicatos afiliados, incluye garantizarle a los directivos de los mismos la continuidad de las condiciones económicas como si estuvieran desempeñando sus labores, garantizándoles a la vez los aditamentos y beneficios salariales que tenían para el momento en que entraron a cumplir dichas funciones, o que se generen durante las mismas.

La Sala luego de declararse competente para decidir observó que el asunto planteado estuvo ajustado a derecho el sentenciador de la recurrida, así como el a quo, al emitir sus fallos desestimando la pretensión deducida. La Instancia casacional señaló que conforme se indicó en ambos fallos y lo ratificó el formalizante, la Convención Colectiva en referencia lo que dispone es que los trabajadores de la empresa, al ser designados dirigentes sindicales, de una parte, continuarán percibiendo los aditamentos o beneficios que tenían al momento de su designación, y de la otra que, a los fines y efectos de su actividad como tales dirigentes, recibirán viáticos, asignación de vehículo y gastos de vida. Destacó que los beneficios en cuestión que recibía anteriormente y tiene derecho a seguir percibiendo, formarán parte del salario del trabajador que es designado dirigente sindical, siempre que se llenen los requisitos que la doctrina exige en general al respecto; mas no que luego de esa designación y que los beneficios sean percibidos por razón o con ocasión de la misma, pasen los mismos a constituirse en elementos integrantes del salario. Para finalizar indicó que en este caso, conforme a lo establecido por la recurrida y lo que se aprecia del escrito de formalización, el recurrente en ningún momento alegó que en el caso concreto los beneficios citados los hubiere percibido el actor como contraprestación de su actividad normal de trabajador, anterior a la designación como dirigente sindical; pues su pretensión se contrae a que le sean reconocidos como parte del salario, los que comenzó a recibir en su condición y funciones de Secretario General del referido Sindicato, lo cual resulta en todo caso improcedente, conforme se ha indicado.