La Oradora de Orden en la Sesión Solemne de Apertura de las actividades judiciales del año 2008 en el estado Aragua, fue la magistrada Yris Peña de Espinoza, presidenta de la Sala de Casación Civil del Tribunal Supremo de Justicia e inspectora General de Tribunales. El acto se llevó a cabo en Maracay, ciudad capital de dicha entidad y estuvieron presentes entre otras autoridades, los magistrados, Luis Martínez y Evelin Marrero y la jueza rectora del estado Aragua, Carmen Esther Gómez Cabrera.                                         

En su discurso, la magistrada resaltó la Resolución Nº2002-00038 que fue una propuesta de la Sala de Casación Civil y mediante la cual se permitió la incorporación de los principios rectores de la oralidad en aquellas causas que cursen en los Juzgados de Municipio escogidos como tribunales pilotos  de Maracaibo, estado Zulia, y de área Metropolitana de Caracas. Explicó que desde su implementación se ha evidenciado las limitantes existentes en materia de oralidad civil, "las cuales emergen del propio cuerpo normativo adjetivo, es decir, del propio Código de Procedimiento Civil".

También habló del proyecto de Resolución, igualmente elaborado por la Sala de Casación Civil, que dentro de las limitantes legales impuestas, permite ampliar el ámbito de aplicación de la oralidad, procurando generar un mecanismo que descongestione los tribunales de primera instancia civil. Enfatizó que su aprobación en la Sala Plena del TSJ, ayudará a combatir la morosidad en la tramitación de los procesos, y al mismo tiempo garantizará un juicio revestido de ciertas condiciones de oralidad, celeridad e inmediación procesal.

En el mismo sentido, informó que la Sala que preside está trabajando en la elaboración de un proyecto de Código de Procedimiento Civil, inspirado en el Código Procesal Civil Modelo para Iberoamérica, para que la Asamblea Nacional, previa solicitud del TSJ, "promulgue y publique el instrumento procesal que incorpore definitivamente los principios constitucionales de inmediación, celeridad, publicidad y oralidad en materia civil".

Igualmente, señaló que durante reunión establecida entre los integrantes de la Asamblea Nacional con la directiva del Máximo Tribunal, se le hizo énfasis a los parlamentarios de la necesidad de incluir en la agenda legislativa del año 2008, la discusión de un nuevo Código de Procedimiento Civil, que garantice los postulados constitucionales antes mencionados.

Otro aspecto que la Magistrada resaltó fue la importancia de considerar un nuevo diseño de proceso civil en el cual la celeridad procesal se traduzca en "el derecho a un juicio sin dilaciones indebidas, caracterizado por la simplificación de los trámites, y la adopción en definitiva de un procedimiento breve, oral y público a los fines de alcanzar una tutela judicial efectiva, lo cual constituye un verdadero anhelo y una necesidad inminente que resolver en nuestros Tribunales Civiles.

2007 AÑO DE ALTO RENDIMIENTO

La magistrada Yris Peña Espinoza, en su discurso también explicó "el alto rendimiento" que tuvo la Sala de Casación Civil durante el año 2007. Resaltó que durante ese período ingresaron 907 expedientes, de los cuales al finalizar el año, 764 se encontraban en etapa de sentencia, lo que arrojó una productividad de 71,07%.

Agregó, que adicionalmente se decidieron 516 expedientes correspondientes de años anteriores, que generaron un total de 1.059 decisiones dictadas durante dicho período. "Siendo la productividad de la Sala de 138,61%.

Expresó que estos resultados se pudieron obtener, entre otras acciones por la labor desarrollada en las Salas Accidentales, "puesto que como política de celeridad y eficacia, se ordenó que en aquellos casos en los cuales las ponencias le correspondían a los Magistrados Suplentes y los Conjueces, éstas fueran reasignadas a sus Magistrados titulares de acuerdo al orden existente, generándose un avance de notoriedad pública a favor de los justiciables quienes aguardaron años para poder obtener un pronunciamiento en cada uno de sus casos".

JUECES QUE SE DEJEN INTIMIDAR

NO MERECEN SER MAGISTRADOS

La magistrada Peña reflexionó acerca de que los jueces "somos y seremos criticados duramente debido a que las decisiones afectan o pueden afectar intereses poderosos que recaen sobre temas que afectan o pueden afectar valores profundamente enraizados en la sociedad". Sin embargo, advirtió que las críticas son parte de la labor de hoy día iniciada para la construcción de un Estado Social. "Jueces que se dejen intimidar por expresiones sectorizadas, no merecen ser magistrados".

Planteó como componentes de una triología indispensable para obtener una verdadera justicia, los elementos: un poder independiente, jueces dignos y un pueblo educado.

También advirtió que un nuevo orden ético debe ser establecido como base para la conformación del "deber ser del sistema judicial" que sea de observancia obligatoria en especial del juez, "pues como elemento esencial del mismo y como administrador de justicia le está vedado el inobservarlo". Pero expresó que no se puede pensar que sólo el Juez debe ser proveedor de atributos inherentes a la ética misma, "todos los que conformamos el sistema de justicia, y en esto se engloba a la universalidad de personas que lo componen", deben exteriorizar la existencia de los valores de la ética, "pues de qué serviría tener jueces probos, honestos y éticos, si el resto de individuos que conforman el sistema de administración de justicia carecen de tales valores".