Detalle de Nota de Prensa

Con la finalidad de suministrar a los trabajadores información útil para mejorar su salud y prevenir enfermedades neumocóccicas, la Oficina de Comunicaciones de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura organizó dos charlas.

Durante la primera charla, "La clave para una mente sana y un cuerpo sano", el especialista en nutrición Wander Pineda, adscrito al Servicio Médico de la DEM, brindó a los participantes una serie de recomendaciones a los fines de mantener una alimentación balanceada y prevenir enfermedades.

Entre los factores considerados importantes para una vida sana están: la buena alimentación, respirar aire puro, ingerir agua y exponerse moderadamente al sol, así como el ejercicio físico y evitar sustancias tóxicas.

Explicó que la alimentación es muy importante para una vida saludable y que es necesario mantener los niveles de carbohidratos en 60%, proteínas entre 14% y 16% y grasas entre 24% y 26%, para evitar trastornos metabólicos que pueden provocar la aparición de enfermedades crónicas en los adultos. Añadió que los carbohidratos son la principal fuente de energía del organismo, pero cuando superamos el límite se pueden presentar problemas de obesidad, entre otros.

Añadió que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud se deben consumir carbohidratos complejos, que son aquellos compuestos por almidón, y disminuir los simples, constituidos por azúcares blancos refinados. Una fuente de carbohidratos complejos son los cereales, ricos en fibra y de efectos beneficiosos en patologías como la diabetes y en trastornos metabólicos con alteración de colesterol y triglicéridos; además, ayudan a evitar enfermedades como el cáncer.

Expresó que la ingesta de proteínas fortalece el sistema inmunológico y produce protectores orgánicos para evitar infecciones y para la formación de tejido muscular. Sin embargo, no se deben consumir en exceso porque se trasforman en grasa. Se encuentran, entre otros, en derivados lácteos. Algunos son ricos en grasas saturadas y colesterol, por lo que pueden generar problemas cardiovasculares e hipertensión arterial.

En cuanto al consumo de grasas o lípidos, el especialista en nutrición dijo que su consumo desmedido puede ocasionar un trabajo excesivo del hígado y del páncreas. Según la OMS el aumento de grasas incrementa el riesgo de presentar enfermedades como cáncer de mama, colon y próstata. También recomiendan no exceder los 300 miligramos de colesterol al día.

Al referirse a la actividad física, dijo que la OMS considera que los ejercicios regulares tienen efectos positivos en la salud porque reducen condiciones crónicas y aquellas emocionales como el estrés. Mencionó que la práctica de ejercicios aeróbicos reduce la presión arterial, mientras que los ejercicios de resistencia contribuyen a fortalecer los músculos y el nivel óseo. De igual forma previenen la obesidad, tienen un efecto tranquilizante y antidrepresivo, previenen el insomnio, regulan el sueño y estimulan la participación y la iniciativa, entre otros beneficios. Finalmente, recomendó la reducción en el consumo de alcohol, cigarrillo, café y drogas.

"Todo niño merece estar protegido"

Por su parte, la representante laboratorios Wyeth, Elizabeth Visciglio, atendiendo una invitación del Servicio Médico de la DEM, explicó a los trabajadores la importancia de vacunar a sus hijos contra el neumococo.

Agregó que la enfermedad neumocóccica es un conjunto de enfermedades causadas por la bacteria Streptococcus Pneumoniae que afecta principalmente a niños menores de 2 años y adultos mayores de 65.

Entre las enfermedades que produce la bacteria se encuentran: neumonía, otitis media, sinusitis, bacterimia y meningitis.

Dijo que el tratamiento de las enfermedades se realiza a través de antibióticos, pero su uso indiscriminado ha hecho disminuir su eficacia.

Las enfermedades producidas por el neumococo se diseminan fácilmente entre los niños menores de 2 años a través de gotas de saliva, estornudos o contactos de la mano con la boca.

Informó que la prevención de estas enfermedades es posible con la aplicación oportuna de la vacuna Neumocóccica Conjugada Heptavalente, la cual debe ser colocada en tres dosis y antes del primer año de vida, seguido por un refuerzo durante el año siguiente. Nos obstante, hasta los 9 años de edad es posible la aplicación de la vacuna.

Prensa-DEM