El presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Iván Rincón Urdaneta, hizo un llamado a todas las instituciones del Estado y a la comunidad en general, para cerrar filas contra el flagelo de la delincuencia, bien sea generando políticas que permitan fortalecer iniciativas como la de los Jueces de Paz o para incentivar una “revolución cultural” que permita educar al ciudadano y prevenir de esta manera el delito.

Las apreciaciones del titular del TSJ se produjeron en el marco de la sesión plenaria convocada por la Asamblea Nacional para debatir el tema del auge delictivo que actualmente se presenta en todo el país, a la cual se dieron cita los principales sectores de la sociedad venezolana, entre ellos el empresariado representado por Fedecámaras, la Iglesia, el Ejecutivo nacional, la Fiscalía General de la República, la Defensoría del Pueblo, y representantes de otras instancias.

El magistrado presidente fue enfático al señalar que la educación es uno de los elementos fundamentales para enfrentar la delincuencia. “Cuando Ana María Sanjuán, experta de la Universidad Central de Venezuela, en su obra Cómo se produce la delincuencia, nos dice que en los países donde se ha reducido sus niveles de criminalidad, han puesto en práctica políticas que involucran a todos los ciudadanos y a todos los poderes públicos. Es la reorganización lo que necesitamos y la redimensión de las políticas que en esta materia tiene que implementar el Estado, para que logremos la prevención y el apoyo de los más vulnerables; y que garanticen por otra parte, la protección de los Derechos Humanos y la seguridad de todos los ciudadanos” – expresó.

- La educación que dan en los colegios, como todos sabemos es complementaria, la fundamental está en el hogar, y es allí donde lamentablemente muchos niños presencian videos con violencia y pornografía. Por eso, no les estamos dando una verdadera cultura a nuestros hijos, que nos permita llegar a una revolución cultural y alcanzar la paz y lograr que los venezolanos nos formemos, no para el delito sino todo lo contrario, hacia una cultura contra la violencia – señaló.

En este sentido fue claro al decir que el problema planteado no se resolverá con simple represión sino que se debe pensar en las iniciativas que nos permitan determinar cómo vamos a formar las generaciones futuras y cuáles son las políticas que deben seguir todas las instituciones del Estado, incluido el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. Sobre este particular planteó la necesidad de crear un Centro Computarizado que permita hacer un seguimiento a las fuerzas policiales para controlar la represión en la calle, para que estos actúen organizadamente con el apoyo de las informaciones que aporten los ciudadanos.

Igualmente, hizo especial referencia a la necesidad de fortalecer la Justicia de Paz, a la cual están obligados por ley los Alcaldes de todos los Municipios “para la resolución alterna de los conflictos. Hay que buscar medios diferentes a los establecidos en los tribunales, pero con la presencia de los órganos judiciales competentes”.

Aprovechó el presidente del Alto Tribunal para consignar ante el parlamento los informes contentivos de los resultados de las reuniones que se han venido realizando con la Fiscalía General de la República, con la Defensoría del Pueblo, con el Ministerio de Interior y Justicia, con los diferentes cuerpos policiales y con las Organizaciones No Gubernamentales así como las cifras, propuestas, “y datos estadísticos que permiten llegar a una reforma puntual, no sólo del Código Orgánico Procesal Penal sino de las leyes que están en su entorno”.

JUECES DE CONTROL

El magistrado presidente del TSJ, Iván Rincón Urdaneta, también trató el tema de los Jueces de Control, en este sentido informó que se enviaron 80 jueces a los Estados Unidos, gracias a un convenio con la Embajada de dicho país, para que se preparen en materia de investigación, funcionamiento de los juzgados de control y coordinación entre dichas instancias con el Ministerio Público, fuerzas policiales y el resto de tribunales.

“Asimismo, hemos recibido la exhortación de la Asamblea Nacional para que se labore 24 horas continuas en los Juzgados de Control. En este sentido, puedo decir que una vez que se crearon dichos juzgados se estableció el cronograma de trabajo, pues debe haber un juez de control permanentemente de guardia. Sin embargo, los recursos presupuestarios hasta ahora no han permitido destinar el dinero suficiente para crear los jueces de control que se requieren en cada circunscripción judicial” – señaló.

Por otra parte, el titular del TSJ planteó la necesidad de crear sedes idóneas para albergar a los menores que transgreden las leyes, que permitan reeducarlos y reinsertarlos en la sociedad. “Hay que llamar al presidente de la Asociación de Alcaldes, a los Gobernadores, al Ejecutivo nacional, a los Ministros involucrados en el área, para que se creen los centros destinados a los menores, pues la solución no está en manos del juez o del fiscal, sino que la tiene el experto que le va a dar tratamiento a ese niño a ese adolescente, para reinsertarlo a la sociedad a donde pertenece”.

Para finalizar, dijo que la respuesta central del TSJ para enfrentar la delincuencia es consolidar el equipo técnico y político permanente para coordinar las políticas, planes y acciones en materia de seguridad ciudadana, “y lo que es más importante, con la evaluación y rendición de cuenta puntuales que todos los poderes involucrados tenemos que hacer en un momento determinado, unido al fortalecimiento de los cuerpos policiales, pues no podemos seguir teniendo policías viviendo en condiciones precarias, sin armamento sin patrullas, sin coordinación. Sobre esta última materia, se está trabajando en el diseño de una red nacional que presentará el Ministerio de Interior y Justicia, que va a permitir tener un registro actual de los beneficios que conceden los jueces a los procesados para evitar el ‘reciclaje’ de delincuentes”.