La Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), magistrada Luisa Estella Morales Lamuño, expresó que en el momento actual que viven las naciones latinoamericanas el concepto del nuevo constitucionalismo resulta vital para avanzar en el tema de los derechos humanos para la ciudadanía.
Así lo explicó durante su participación este miércoles en la instalación del seminario "Los Derechos Humanos en el nuevo Constitucionalismo Latinoamericano", evento organizado por la Defensoría del Pueblo venezolana y en la que participan como ponentes, entre otros, defensores del pueblo de varios países de centro y Suramérica. La representante del Alto Juzgado de la República también indicó que analizar el nuevo constitucionalismo y su relación con el avance en la lucha por los derechos humanos es una manera de entender cómo, en el caso de Venezuela, la sociedad ha ido avanzando.
Se refirió la Magistrada al hecho de que diversos sectores han señalado que la Constitución aprobada en el año 1999 es profundamente programática, característica que " a su juicio " debía poseer a la luz del proceso de cambios que vive Venezuela. "No podíamos encerrarnos en el tema de los derechos de una manera cuantitativa, que se contemplara allí un elenco de ellos, sino que debía trabajarse en un texto constitucional que diese la oportunidad de la progresividad de esos derechos humanos, su aplicación y conceptualización a través del tiempo".
Destacó que en el momento actual que vive la nación muchos cambios sustanciales se estén realizando a través de la aprobación de leyes, en una situación que consideró digna de estudio. "Hablamos de un conjunto de leyes aprobadas que en su contenido desarrollan una serie de derechos que ya están consagrados en la Constitución, y aún derechos no consagrados que se han venido estableciendo a través de la jurisprudencia de una manera progresiva".
Reflexionó sobre el hecho de que en la nación se avanza en el constitucionalismo, "que ya no es concebido como aquel Estado de derecho encerrado en un concepto normativista positivista inamovible, sino que contempla la oportunidad de la argumentación jurídica para ir desarrollando lo que debe ser la estructura que rija realmente a un proceso verdaderamente democrático. La doctrina del nuevo constitucionalismo avanza desde el normativismo hacia el concepto de progresividad de las leyes".
La Presidenta del TSJ expuso como ejemplo el desarrollo en Venezuela, a través de la jurisprudencia, de aspectos como la flagrancia para el caso de la justicia de género, concepto ya establecido de una manera taxativa y cerrada en el Código Penal, pero que mediante una sentencia de la Sala Constitucional pudo ajustarse al criterio necesario a esta realidad. "Este hecho fue posible gracias a haber adoptado como doctrina el concepto de la argumentación del nuevo constitucionalismo, que ha permitido a la Sala Constitucional y a todo el Poder Judicial venezolano desprenderse de la rigidez del normativismo y avanzar en la dirección de la progresividad de los derechos humanos".
Destacó también la importancia de entender que en países como Venezuela, Ecuador y Bolivia, el tema de los derechos humanos ya no se trata de aquel catálogo establecido de una manera taxativa, "sino que cada día van creciendo las oportunidades para que el ser humano busque su bienestar, su desarrollo y la oportunidad de una auténtica libertad a través del ejercicio constitucional".
Durante la instalación del seminario "Los Derechos Humanos en el Nuevo Constitucionalismo Latinoamericano", también hicieron uso del derecho de palabra el presidente de la Asamblea Nacional, Fernando Soto Rojas, y la Defensora del Pueblo, Gabriela del Mar Ramírez, quienes destacaron que los derechos humanos deben ser tema central en el marco de las exigencias de las sociedades en la coyuntura nacional y mundial y que este tipo de experiencias de intercambio sirven para seguir avanzando en la dirección de darle cada vez más participación al ciudadano. |